Algunos mensajes más entresacados del foro de Idealista.com
I
Recuerdo la primera empresa donde trabajé. En el 91 los encargos cayeron, pero aguantó la alegría, el jefe pidio un crédito con el aval de su vivienda personal y el terreno donde se asentaba la empresa.
Los encargos bajaron en el 92 pero la empresa tenía dinero para aguantar el tipo. La competencia cerraba y despedÍa, nosotros celebrábamos comidas de empresa, comprábamos maquinaria, y contratábamos comerciales con el crédito concedido, la competencia nos observaba perplejos, ¿Cómo era posible que nuestra empresa creciera mientras ellos se apretaban el cinturón?
En el 93 cerraron otras empresas, el jefe andaba muy nervioso, las broncas a los comerciales se oían desde la calle, entrar al trabajo cada día se hacia muy difícil, los encargos seguian bajando.
En el 94 la empresa se declaró en quiebra, el banco se echó sobre el jefe como buitres, nos quedamos sin empleo, cada uno se adapto como pudo. En el 95 el jefe entro en una profunda depresión que le llevo a un destructivo divorcio.
La situación actual me recuerda aquella experiencia, la competencia es Francia y Alemania, nuestra empresa es España.
II
martes 04 octubre 09:00, LUISITO dijo:
El que los hipotecados españoles “vivan por encima de sus posibilidades” no es un dogma ni una opinión basada en la marca de los trajes que usan, o como sean sus relojes o sus coches. Es una conclusión objetiva basada en las cuentas económicas. La cuantía de las letras de un crédito, el costo que supone la financiación de una compra la establece la cuota de un crédito a tipo fijo. Los tipos varían y las cuotas de los créditos a tipos variables también lo que hace que gestionar un crédito variable sea más dificil y más arriesgado. Hay que crear unas reservas, con lo que se ahorra cuando los tipos están bajos, para poder cubrir las etapas en que los tipos están altos. Lo normal (lo que debería ser normal) es que el hipotecado contrate un crédito a tipo fijo dejar que sea el banco y sus profesionales los que se ocupen de esta gestión y de compansar las épocas de vacas flacas con los excedentes obtenidos los años de vacas gordas. Más de un 95% de los hipotecados han optado por los tipos variables y por ser ellos mismos personalmente quienes gestionen las reservas necesarias. Sin embargo las cifras de ahorro en españa nos dicen que la manera que tienen los hipotecados de gestionar esas reservas es simplemente no hacer ninguna reserva y gastarse el excedente como si nunca fueran a llegar los años difíciles. Tampoco contratan seguros para cubrirse del riesgo de repunte de tipos. eso es lo que objetivamente significa que viven por encima de sus posibilidades: que están gastando un dinero que debería servir para hacer frente a las futuras subidas de tipos, bien en forma de reserva bien en forma de seguro.
III
martes 04 octubre 09:53, LUISITO dijo:
Siempre existen las opciones. Una ha sido contratar a tipos fijos del orden del 5.5% . Ese tipo de crédito no ha sido contratado.
Otra opción era construir una reserva con lo ahorrado en la época de tipos históricamente bajos. Esa reserva no ha sido hecha.
Una tercera opción son los seguros contra repuntes que tampoco han sido contratados.
Supongo que lo que hay en la cabeza de los hipotecados es una idea similar a la siguiente: puesto que una subida de tipos afectaría a demasiada gente el gobierno se hará cargo de ella. O bien estas variantes: puesto que añadir el costo de un seguro haría impagables las cuotas, ese seguro tendrá que pagarlo el gobierno o bien las desgravaciones fiscales tendrán que aumentar para compensar lo que las cuotas suban debido a cualquier repunte de tipos. Todas estas soluciones, basadas en la injusticia y el abuso, tienen un problema: equivalen al suicidio económico del país.
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