La muy extraña película Primer establece una situación muy interesante. Se han realizado cientos de películas sobre viajes en el tiempo. Siempre me ha llamado la atención la soltura con que se desenvuelven los viajeros en el pasado y las facilidades con que cuentan dado que “saben el futuro”. Hablaré sobre ello en otro post, pero ahora quiero centrarme una cuestión: Si pudieras viajar en el tiempo, ¿Cómo te aprovecharías de la situación?
Aunque parezca que hay cientos de miles de formas de hacerse rico, no creo que resulte tan fácil. Te despiertas y te encuentras en el año 1950. ¿Crees que podrías hacerte millonario en menos de un año? Ten en cuenta que no has podido prepararte para el viaje. Ahora estás en Madrid. Años 50, sabes que los pisos cutres que hay en Moncloa serán apetitosos solares en el futuro. Quizás sepas qué Copas de Europa ganará el Real Madrid. Sabes que en 1977 habrá una democracia en España. ¿Qué podrías hacer para sacar partido de tus conocimientos?
La película Primer trata de ser realista sobre los viajes en el tiempo. Sugiere la posibilidad de un viaje corto y me resulta mucho más interesante. Imagina que un día de tu vida podrás viajar de las 2:00 pm de la tarde a las 9:00 am del mismo día. Tienes una semana para preparar el viaje. ¿Qué harías? ¿Podrías hacerte millonario con la información de una mañana?
Desde luego, es una cuestión fascinante. Si pudieramos viajar de la noche a la tarde podríamos saber las apuestas ganadoras de las loterías, o los resultados de la quiniela, que se realizan por la noche. Así, podríamos comprar billetes ganadores antes de que se celebrara el sorteo. Podríamos comprar muchos billetes ganadores, podríamos hacernos millonarios.
Sin embargo, tal y como sucede en la película, si el viaje se hace de la hora del almuerzo a la mañana no hay grandes posibilidades de obtener informaciones muy valiosas.
Quizás la única opción es la de la bolsa. En el mercado de valores español, sin embargo, en un día de sesión normal, el valor que más suba no lo hace en más de un 10%. Así, suponiendo que tenemos un capital inicial de 6.000 euros, sólo podríamos aumentarlo a unos 6.600 al final del día.
Otra opción es pedir un préstamo y, con el dinero prestado, comprar acciones de bolsa de ese valor privilegiado. Aún así, el banco no nos prestaría mucho dinero. Imaginemos que el banco nos prestara 60.000 euros. Si ganamos un 10% “sólo” hemos ganado en un día 6.000 euros, y aún Hacienda nos trendría que meter un buen crujido.
Una posibilidad más compleja sería realizar una transacción en un país en que nuestra mañana sea su tarde. Así, si viajo en Madrid de las 2.00 pm a las 9.00 am, podría tener información sobre la lotería japonesa, información que podría aprovechar. Aún así me resultaría muy complicado y costoso realizar dicha inversión, por cuanto necesitaría a alguien allí, que realizara la transacción, de confianza y pensando que ese dinero tendría que ir de vuelta a España.
También se me ocurre que se podría apostar en un casino virtual. Podría memorizar una serie de jugadas durante la mañana y, cuando volviera, recordaría los números ganadores. Sería una buena solución, si pudiera fiarme de que los resultados de la ruleta son independientes de las apuestas de los jugadores y de los resultados anteriores, algo que me cuesta creer.
Es duro, pero tal vez no sea posible aprovechar algo tan valioso como todo el conocimiento por adelantado de lo que ocurra en medio día.
lqa verdad que la peli esa me dejo loco.
pero en verdad si se pudiera hacer eso habria que hacelo en vez de con un margen de horas un un margen de un par de dias asi por lo menos la quiniela la puedes hechar.
con la loteria o los cupones seria distinto por que tendrias que desplazarte a otra ciudad para comprar un nº premiado.
pero weno hay mesha cosas que se podrian hacer si se pudieran hacer viajes en el tiempo…
Ale “The Noise Maker”.
SI VIAJAR EN EL TIempo!!!