Tenía que ser en Málaga: surge otro delincuente de comic, el atracador de dentistas:
El atracador de los dentistas ha vuelto a las andadas. Conocedor de que la mayoría de las clínicas de la capital cierra en agosto, se ha desplazado a la Costa. Hace apenas una semana, cometió el tercer asalto en la provincia, esta vez en una consulta del centro de Fuengirola, donde maniató y retuvo a ocho personas durante cerca de una hora. El robo lleva su sello.
¿En qué clase de país vivimos? Ya escribí sobre el asesino de la baraja , un criminal más movido por el aburrimiento que por la psicopatía.
Ahora nos encontramos con uno que, sin dejar de ser despiadado, combina una sensación que todos hemos sentido. ¿Quién, tras ir al dentista, no se siente robado?
En este caso, el delincuente aprovecha la situación, y es que es mucho más cómodo robar a un grupo de personas en un piso que dar un palo en una tienda, con tanta gente pasando delante de la puerta.
En este último atraco no he podido dejar de fijarme en un detalle. Fueron 8 las personas desvalijadas: el médico, la enfermera, tres pacientes y otros tantos acompañantes. El monto del robo fueron algo más de 2.000 euros. Esto son unos 300 euros por barba.
El ladrón les quitó las tarjetas de crédito y les conminó a que dieran los números secretos. De un cajero puedes sacar un máximo de 600 euros. Algunos tal vez menos, porque hubieran sacado algo de dinero durante el día. Muchos habrían sacado pasta para pagar al sacamuelas. Ese dinero entra en la cuenta de los 2.000 euros.
No sé si me equivoco en los cálculos. Si la mitad de la gente no llevaba tarjeta, si los acompañantes, exentos a priori del sablazo, iban flojos de dinero. El caso es que los ladrones apenas pudieron llevarse la mitad de lo máximo posible.
No voy a pensar que los ladrones sacaran menos dinero del máximo posible. Lo que creo es que la gente estaba tan justa de pelas que tenía menos de 600 euros en el banco. Eso me parece fuerte, porque esta gente, robada, va a tener que llegar a fin de mes con dinero prestado. Gente con la paga extra recién cobrada. Clase media que va al médico de pago.
Ahora cambio el titular de la noticia:
El atracador de los dentistas demuestra que el 50% de los españoles vive al día, sin un duro en el banco o en el bolsillo.